Valeria Villalobosmembuat kutipan4 tahun yang lalu
Deberían haber visto a Dios y en su lugar habían visto, adoptando los rasgos de su hijo bienamado, a aquel a quien la Biblia llama Satán, es decir, el adversario.
Iranyelamembuat kutipan2 bulan yang lalu
Me pregunté si en el momento de esa foto ya habría empezado a mentir.
Iranyelamembuat kutipan2 bulan yang lalu
Tenía miedo. Miedo y vergüenza. Vergüenza ante mis hijos porque su padre escribiese sobre aquello. ¿Todavía había tiempo de huir? ¿Dónde estaba mi vocación concreta de tratar de comprenderlo, de mirarlo de frente?
Iranyelamembuat kutipan2 bulan yang lalu
se extendía hablando de su propio sufrimiento, su duelo imposible,
Iranyelamembuat kutipan2 bulan yang lalu
o existen sin duda treinta y seis mil maneras de dirigirse a alguien que ha matado a su mujer, a sus hijos y a sus padres y les ha sobrevivido
Ricardo Moramembuat kutipan3 bulan yang lalu
en todos los casos, sin excepción, una lucidez dolorosa era mejor que una ilusión aplacadora
Ricardo Moramembuat kutipan3 bulan yang lalu
«Les van a hablar de compasión. Yo reservo la mía para las víctimas»
Ricardo Moramembuat kutipan3 bulan yang lalu
Antes creíamos todo lo que decía, ahora ya no le creemos nada y él mismo no sabe qué creer, porque no tiene acceso a su propia verdad, sino que la reconstruye con ayuda de las interpretaciones que le ofrecen los psiquiatras
Ricardo Moramembuat kutipan3 bulan yang lalu
Una mentira, normalmente, sirve para encubrir una verdad, algo vergonzoso, quizá, pero real. La suya no encubría nada. Bajo el falso doctor Romand no había un auténtico Jean-Claude Romand.
Ricardo Moramembuat kutipan3 bulan yang lalu
pero me separaba de ella un abismo que no era solamente la intolerable intensidad de su dolor.