Ejercicio de confianza

Las facultades intuitivas solo les dicen lo que quieren, no cómo lograrlo, y eso resulta insoportable

Y Sarah recordó, por primera vez en años, que la interpretación consistía en tener emociones auténticas en circunstancias ficticias. Ya echaba de menos a esa desconocida, su amiga simulada.

–¡Si todavía sois novatos! No intentéis llegar a la cima sin pisar el suelo.

La base necesaria para la reconstrucción del ego es la deconstrucción del ego

Alguna sustancia química hacía que ella fuera para él, él para ella; todavía no estaban tan jodidos por la vida como para no darse cuenta.

Las facultades intuitivas solo les dicen lo que quieren, no cómo lograrlo, y eso resulta insoportable.

anterior colegio, había desarrollado una Fórmula de la que luego se había convertido en esclavo: primero Besos con Lengua, un tiempo determinado, luego Tetas, un tiempo determinado, después Dedo, un tiempo determinado, para por fin Follar.

Tenso, callado, sin ningún talento visible, con un fuerte acento del que estaba claro que se avergonzaba

Un día, en Ejercicios de Confianza, quizá ya avanzado el otoño –David y Sarah no estaban muy seguros; no hablarían de ello hasta el verano–, el señor Kingsley apagó todas las luces de la sala de ensayos, que no tenía ventanas, y los sumió en la oscuridad de una cámara cerrada.

Los dos tenían experiencia –ninguno era virgen–, y eso podría haber acelerado o retrasado lo que ocurrió