Editorial Sexto Piso

Estudio en una Universidad del Opus Dei y, aunque tengo amigas, ninguna de ellas está a favor del aborto, a menos que implique programarlo en Houston y que luego del alta del hospital nos vayamos de compras a un mall.

Los objetos son inertes y sólo tienen significado en función de la vida que los emplea. Cuando esa vida se termina, las cosas cambian, aunque permanezcan iguales. Están y no están allí, como fantasmas tangibles, condenados a sobrevivir en un mundo al que ya no pertenecen.

lo dejas todo para cuidarlos y para protegerlos y después se van. es como si te consumieran para conseguir su propia vida

El árbol genealógico de los que migran siempre se parte en dos mitades: los que se fueron y los que se quedaron.

No existe un cuarto propio cuando ellos creen que nuestro cuerpo les pertenece

Resulta irónico, sin duda, que la vida nos enseñe a morir bien y, en medida de lo posible, nos conduzca también a aprender a seguir viviendo tras los efectos de la muerte. Así es la vida.

deja caer las hojas de tu ansia

Durante toda mi vida había sospechado que no era lo bastante interesante, ni lo bastante especial ni poseía el talento suficiente para mantener la atención de los que buscaban mi amistad o mi amor.

Matar y morir por ideas absurdas es la manera en que muchas personas les han dado sentido a sus vidas

Si los gatos pudieran entender la búsqueda humana de sentido, ronronearían deleitados por semejante absurdidad. Vivir como gatos que son ya es sentido de la vida suficiente para ellos. Los humanos, sin embargo, no pueden evitar buscar un significado que trascienda sus propias vidas.