La Comunicación en las Relaciones

● Pedir claridad si es necesario: Una gran cantidad de malentendidos proviene de personas que se alejan de una interacción sin una comprensión clara de lo que la otra persona estaba tratando de decir.

● Utilizar la tecnología de manera eficiente y eficaz: La tecnología puede ser extremadamente útil, pero debe utilizarse para aumentar y mejorar la comunicación cara a cara en lugar de reemplazarla por completo.

● Encontrar (y crear) el momento adecuado: Si algo vale la pena decir, entonces vale la pena tomarse el tiempo para decirlo correctamente.

● Hablar frente a frente: Si es posible, siempre debes tratar de decir lo que necesita ser dicho en persona, en lugar de escribirlo en una carta, texto o correo electrónico o hablar por teléfono.

A veces, necesitamos hablar para decirnos a nosotros mismos lo que pensamos.

Cuando no escuchamos correctamente, terminamos recibiendo una comprensión errónea de lo que el orador está tratando de compartirnos. Esto puede llevarnos a hacer suposiciones que no contienen cabida, a desacuerdos innecesarios y evitables, frustración y conflictos entre el oyente y el orador. Si en cambio damos a las personas espacio y tiempo para ser plenamente comprendidos a través de escuchar pacientemente y con toda nuestra atención, podemos tener una comunicación mucho más eficiente y eficaz

No te apresures a interrumpirlos; hablar no es tu papel cuando estás escuchando.

Si la conversación es importante, siempre es una buena idea asegurarse de que los dos están en un lugar tranquilo para que tengas la oportunidad de escuchar correctamente lo que se está diciendo.

La concentración mental es importante aquí. Necesitas concentrar toda tu atención en mantenerte al tanto con lo que se está diciendo, en lugar de permitirte pensar en otras cosas o dejar que tu atención divague o se distraiga.

Tu trabajo como oyente es entender, no estar de acuerdo.